Amnistía Internacional pide que en el Perú se condene al concebido

Parece ser que el único que no merece amnistía para “Amnistía Internacional” es el concebido. Lo paradójico es que no puede haber persona más inocente que el niño concebido que se encuentra en el vientre de su madre.

Ya en un post del 10 de julio del 2009, Amnistía Internacional promueve el aborto terapéutico en el Perú, señalábamos que:

“Amnistía Internacional es una ONG abortista. Las feministas con gran gozo le abrieron los brazos en el 2007. Como dice el portal IPAS a favor de los mal llamados “derechos sexuales y reproductivos”, “Amnistía Internacional ha adoptado una política más amplia respecto a la salud sexual y reproductiva, que hace un llamado a los estados para garantizar que las mujeres tengan acceso a la atención segura del aborto bajo ciertas circunstancias”.

Ahora seguimos la noticia de  ACI Prensa, en que señala que la organización Amnistía Internacional (AI) ataca de nuevo. Ahora está presionando al Gobierno del Perú para que permita el aborto y anunció que entregará al Ministerio de Salud unas once mil firmas a favor de que se despenalice esta práctica anti-vida.

De visita en Perú, el Secretario General de AI, Salil Shetty, se reunirán este miércoles 27 por la tarde con la Viceministra de Salud, Zarela Solís Vásquez.

Según informa el grupo, en la cita entregarán las firmas recabadas por AI en los últimos meses entre peruanos y extranjeros. Hace un año, solo en la ciudad de Chiclayo, en el norte del país, una campaña de la diócesis local reunió33 mil firmas por la vida y contra del aborto.

AI está difundiendo un informe titulado “Deficiencias fatales: Las barreras a la salud materna en Perú” en el que arguye que la despenalización del aborto puede disminuir la mortalidad materna que afecta a campesinas, mujeres pobres e indígenas.

En este documento, AI manipula el marco legal del aborto terapéutico en Perú, plantea modificar el Código Penal e incorporar en este supuesto el aborto por malformación congénita del bebé e incluso el aborto para las menores de edad.

AI recoge el pedido de las organizaciones feministas locales a favor de un protocolo que regule el aborto terapéutico y presiona al Perú para que ceda ante las presiones del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en el caso de ciudadana Karen Llantoy, a quien se le negó abortar a su hijo con anencefalia (malformación que supone la ausencia total o parcial del cerebro) por no tratarse de un caso de riesgo la vida para la madre.

Como se recuerda, AI, fundada por un católico inglés, rompió hace varios años su neutralidad sobre el aborto y como pronosticaban los expertos ha terminado convirtiéndose en una organización que aboga por esta práctica anti-vida en vez de velar por los verdaderos derechos humanos.

Carlos Polo, director del Population Research Institute, lamentó que AI no entienda la naturaleza del derecho penal peruano. “Cualquier estudiante de derecho de primer año le podría explicar a estos ‘expertos’ que un Código Penal no otorga derechos sino tipifica delitos”, explica Polo.

“Cuando AI afirma que el art. 119 permite el aborto llamado terapéutico, repite consignas feministas, evidentemente sin el menor criterio jurídico. El Código Penal no permite nada, no establece derechos en ninguno de sus articulos. Es una lista de conductas inadecuadas reconocidas por nuestro Estado de Derecho”, agrega.

Asimismo, recuerda que “tanto el Congreso Peruano como el Ministerio de Justicia y otras instancias del Ejecutivo y el Tribunal Constitucional han respaldado el articulo 2 de la Constitución que protege el derecho a la vida del concebido. Si los tres poderes del Estado han desestimado las ‘recomendaciones’ de AI, ir ahora a presionar a un Ministro de Salud es una afrenta para nuestro país”.

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