Primera mentira: Que no se discriminan los embriones con Síndrome de Down
En una entrevista a Luis Noriega, actual director de la Clínica Concebir realizada por Perú 21 del 17 de agosto de 2005, le hacen una pregunta sobre uno de los métodos de fertilización asistida. Aquí, la parte de la entrevista.
¿Qué es el ICSI?
Consiste en agarra un espermatozoide e inocularlo en el óvulo. Para eso hay microscopios con tenzas microscópicas que permiten sujetar un solo espermatozoide y un solo óvulo. Pero eso es lo más burdo del proceso. Lo impresionante viene en la división celular. Si prendió, a las 24 horas serán dos células; a las 48, cuatro; a las 72 ocho. En ese momento, se extrae una partícula – que no altera el embrión- y se estudia genéticamente para, en seis horas, saber si ese embrión es normal – o sea, si no tiene sindrome de Down, por ejemplo-. Si lo es (normal) se lo pone en el útero.
Eso pasa cuando se juega a ser Dios. Se crea un embrión con sindrome de Down y luego se lo descarta. El “estudio genético” ya lo conocemos por el caso que se presentó en nuestro país y es conocido como Diagnóstico Genético Preimplantacional. Ésta es la prueba, en palabras del mismo director de la Clínica Concebir en que se discrimina a los niños con sindrome de Down que, si no terminan como desecho, terminan congelados para siempre.
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Segunda mentira : No hay pareja que no pueda tener hijos
Esta segunda mentira, que ha sido repetida con estribillo comercial por la Clínica Concebir es falsa. Es el equivalente de “cualquiera puede sacarse la lotería”, es cierto pero como sabemos no todos la obtienen. No mienten al decirlo, pero engañan al no aclararlo y para muestra de cómo se comercia con el anhelo de los padres, que tanto se dice defender y respetar por estos centros de fertilización asistida.
El informe es tomado de ACEPRENSA.
En ese año se registraron en Europa 458.759 ciclos de técnicas de reproducción asistida (TRA), siendo España el tercer país en número de intentos (casi 50.000), por detrás de Francia y Alemania. En 2006, había en España 182 centros que proporcionaban estas técnicas, de los que 107 comunicaron datos de su actividad.
Las tasas de éxito se reducen sensiblemente con la mayor edad de la mujer. Para las menores de 34 años, la tasa de partos alcanza el 26,6%; entre 35-39 años es del 20,5%; y para las mayores de 40, se reduce al 8,6%. Según los datos de la ESHRE, la mayor parte de los tratamientos de TRA se aplican a mujeres de 30 a 39 años.