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Los representantes del Concilio Evangélico Peruano (CONEP) que agrupa a más del 85% de las iglesias evangélicas fue a visitar al candidato de Gana Perú el 21 de mayo a la sede de Gana Perú. Encabezaba la delegación el Pastor Víctor Arroyo y llevaban el documento “El País que soñamos” que resumía en una serie puntos los temas que el Concilio consideraba “centrales en la gestión gubernamental y que requieren atención prioritaria en un país plural en términos sociales, políticos, culturales, lingüísticos y religiosos”.
Terminada la reunión, Humala ante los periodistas declara: agradece la visita del Concilio Evangélico Nacional del Perú por “la visita y la entrega del documento (El País que soñamos) que tengo acá en el cual muestran una serie de preocupaciones y que las compartimos y que están recogidas en nuestra propuesta como es el tema en la lucha contra la corrupción, como es el tema de la defensa de la vida y la dignidad humana…”.
¿Era verdad que había coincidencia entre el documento de la CONEP y el Plan de Gobierno de Humala con respecto al tema de la defensa de la vida? Como se podrá ver, en el documento de la CONEP se señala lo siguiente:
- La defensa de la vida y dignidad humanas. Un Estado democrático tiene el deber de cuidar, promover y defender en todo momento a cada uno de sus ciudadanos independientemente de su raza, sexo, edad, cultura o religión. Cuidar y defender la vida implica protegerla desde la gestación en el vientre de la madre, crear las condiciones para que todos los ciudadanos tengan igualdad de oportunidades en términos de una educación de calidad, acceso universal a la salud, trabajo digno y con un salario justo, una vivienda digna, disfrute del tiempo de ocio, etc.
Es decir, si bien no señala con claridad defender la vida desde el momento de la concepción, sí queda claro que la defensa de la vida es desde antes de nacer. Esta posición es más clara si tomamos el comunicado que publicó la CONEP el 19 de octubre de 2010 frente a la propuesta de la Comisión Especial Revisora del Código Penal del Congreso de la República de despenalizar el aborto en casos de violación o se tiene certeza de que el ser humano concebido puede tener malformaciones.
1. Afirmamos que la vida es don de Dios y no concesión del Estado o de los sistemas políticos. Dios ama y defiende la vida. Por esta razón, la Constitución Política del Estado consagra que: “La defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad son el fin supremo de la sociedad y del Estado”; por consiguiente, nada ni nadie y bajo ninguna circunstancia, puede decidir el término de la vida humana.
Así pues queda claro que Humala o no sabía de lo que estaba hablando cuando afirmó que “compartía” la preocupación de la CONEP en el tema de “defensa de la vida y la dignidad humana” o sencillamente utilizó la visita para señalar que coincidía y que la CONEP les daba el apoyo.
Creemos que es esto último, y claro los evangélicos tienen la culpa por no haber salido a tiempo a aclarar, pues la prensa nacional e internacional salió a señalar dicha adhesión. Posiblemente la culpa de este malentendido lo tenga Canal N y la Agencia de Noticias Órbita (esta última vinculada a grupos evangélicos), y que apoya decididamente a Humala. Así se convirtió la visita en apoyo. Y pareció que un grupo claramente defensor de la vida como el evangélico apoyaba a un candidato que tiene en su Plan de Gobierno el despenalizar el aborto.
La misma web de Humala señalaba “Ollanta recibe respaldo de la comunidad evangélica y de transportistas”. Lo cual es falso.
Después de unos días de desconcierto entre los mismos evangélicos en los que se veía claro recriminaciones entre ellos, Víctor Arroyo comunicó que la CONEP no apoyaba a Humala: “Nuestro rol en la sociedad es eminentemente pastoral. Por lo tanto, no asumimos ningún tipo de compromiso político-partidario en la actual contienda electoral”. Ver Andina. Es más señalaron que esta visita con el documento se realizará a la otra candidata.
La agencia católica de informaciones AciPrensa fue más lejos pues le preguntó a Víctor Arroyo por la aceptación del ítem de defensa de la vida del niño por nacer por parte de Humala, y admitió que el candidato “aceptó los términos generales en los cuales está expresado el documento, pero sin mayor desarrollo, sin mayor desagregación del concepto de defensa de la vida“.
En suma, la campaña política de Gana Perú se anotó una buena faena a costa de la ingenuidad y desunión de los evangélicos y Humala siguió confundiendo con respecto al tema del aborto. Los evangélicos le han hecho un muy flaco favor a la defensa de la vida.
