Categorías

Suscríbase a nuestras noticias

¿Lo sabía?

Documento sin título

Visitas

Facebook de Perú defiende la Vida

Homenaje por los 100 años del nacimiento de la Madre Teresa

teresacalcuta 300x220 Homenaje por los 100 años del nacimiento de la Madre TeresaLa Madre Teresa desarmaba con su testimonio de amor. Nadie podría decirle que no creía en sus palabras. Su nombre ha llegado ser sinónimo en la cultura occidental de amor, caridad, solidaridad, amor extremo, paz. Esta mujer que nació hace 100 años fue una activa defensora de la vida del niño por nacer, no sólo con sus palabras, sino con su testimonio y de todo el ejército de saris blancos que habían sido cautivadas por el llamado de Dios y el estilo de vida de esta mujer albanesa.

Aquí ponemos algunos de sus pensamientos con respecto al valor de la vida del niño por nacer, la maternidad y el aborto.

  • La maternidad: el don de Dios para las mujeres. Ese poder especial de amar que pertenece a la mujer, es visto más claramente cuando ella se convierte en madre. La maternidad es el don de Dios para las mujeres. ¡Qué agradecidos tenemos que ser con Dios por este magnífico regalo que trae tanta alegría a todo el mundo, tanto a mujeres como a hombres! Sin embargo, podemos destruir este regalo de la maternidad, especialmente con el mal del aborto, pero también cuando pensamos que otras cosas, como empleos o posiciones, son más importantes que el amar, que darse uno mismo a los demás. Ningún trabajo, ningún plan, ninguna posesión, ninguna idea de libertad puede tomar el lugar del amor. Por tanto, cualquier cosa que destruya el don de Dios de la maternidad destruye su más precioso don a las mujeres la habilidad de amar como mujer.
  • El aborto mata la paz del mundo…Es el peor enemigo de la paz, porque si una madre es capaz de destruir a su propio hijo, ¿qué me impide matarte? ¿Qué te impide matarme? Ya no queda ningún impedimento.
  • A todos los jóvenes les digo: Ustedes son el futuro de la vida familiar; son el futuro de la alegría de amar. Mantengan la pureza, mantengan ese corazón, ese amor, virgen y puro, para que el día en que se casen puedan entregarse el uno al otro, algo realmente bello: la alegría de un amor puro.
  • Pero, si llegaran a cometer un error, les pido que no destruyan al niño, ayúdense mutuamente a querer y a aceptar a ese niño que aún no ha nacido. No lo maten, porque un error no se borra con un crimen. La vida del fruto de ese amor pertenece a Dios, y ustedes tienen que protegerla, amarla y cuidarla. Porque ese niño ha sido creado a imagen y semejanza de Dios y es un regalo de Dios.
  • La vida de cada ser humano, como que ha sido creación de Dios, es sagrada y de infinito valor, porque El nos ha creado a todos nosotros, incluso al niño recién concebido. La imagen de Dios está en ese niño que aún no ha nacido. Por eso, pienso que aquellas naciones que destruyen la vida legalizando el aborto son las más pobres, porque temen alimentar a un niño más y, por eso, agregan un cruel asesinato más a este mundo.
  • En Calcuta tratamos de combatir el aborto mediante la adopción. Me gustaría abrir muchos de estos centros para niños en los países que han aceptado el aborto. En los que tenemos por toda la India nunca tuvimos que rechazar a ningún niño, y todos están felices en sus nuevos hogares.
  • Es maravilloso pensar que Dios ha creado a cada niño. Leemos en las Escrituras que Dios nos dice: “Aún si una madre llegara a olvidar a su hijo, yo no te olvidaré. Te llevo grabado en la palma de mi mano. Eres valioso para mí. Y te he llamado por tu nombre.”
  • Estoy convencida de que los gritos de los niños cuyas vidas han sido truncadas antes de su nacimiento, hieren los oídos de Dios.
  • Muchos se manifiestan preocupadísimos por los niños de la India o por los de África, donde tantos mueren, sea por desnutrición, hambre o lo que fuera. Pero hay millones deliberadamente eliminados por el aborto.
  • Por eso elevo mi voz en la India y en todas partes; hagamos que todo niño, nacido o no, sea un niño deseado. El aborto va en contra del mandamiento del amor.
  • Creo que si los países ricos permiten el aborto, son los más pobres y necesitan que recemos por ellos porque han legalizado el homicidio.
  • Jesús entregó su vida por amor a nosotros. Así, una madre que está pensando en abortar debería ser ayudada a amar; es decir, a poner en segundo lugar sus proyectos y su tiempo libre, y a respetar la vida de su hijo. También el padre del niño, quien quiera que sea, debe mostrarse disponible.
  • Todo país que acepta el aborto es porque su gente no ha aprendido a amar, sino que recurre a la violencia para obtener lo que quiere.
  • Jesús dijo: “El que recibe a un niño como éste en mi nombre, a mí me recibe.” Al adoptar un niño, esas parejas reciben a Jesús; por el contrario, al abortar, rechazan a Jesús.
  • Por favor no matéis a los niños, yo los quiero. Con mucho gusto acepto todos los niños que morirían a causa del aborto.
  • El aborto empobrece a la gente desde el punto de vista espiritual; es la peor pobreza y la más difícil de superar.
  • Cuando le dicen a la Madre Teresa que hay demasiadas criaturas en la India, ella responde: ¿Piensa usted que hay demasiadas flores en el campo? ¿Demasiadas estrellas en el cielo? Mire a esta niña, es portadora de la vida; ¿no es una maravilla? ¿Cómo no quererla?
  • Pero la amenaza más grande que sufre la paz hoy en día es el aborto, porque el aborto es hacer la guerra al niño, al niño inocente que muere a manos de su propia madre. Si aceptamos que una madre pueda matar a su propio hijo, ¿cómo podremos decirle a otros que no se maten? ¿Cómo persuadir a una mujer de que no se practique un aborto? Como siempre, hay que hacerlo con amor y recordar que amar significa dar hasta que duela. Jesús dio su vida por amor a nosotros. Hay que ayudar a la madre que está pensando en abortar; ayudarla a amar, aún cuando ese respeto por la vida de su hijo signifique que tenga que sacrificar proyectos o su tiempo libre. A su vez el padre de esa criatura, sea quien fuere, debe también dar hasta que duela.
  • Al abortar, la madre no ha aprendido a amar; ha tratado de solucionar sus problemas matando a su propio hijo. Y a través del aborto, se le envía un mensaje al padre de que no tiene que asumir la responsabilidad por el hijo engendrado. Un padre así es capaz de poner a otras mujeres en esa misma situación. De ese modo un aborto puede llevar a otros abortos. El país que acepta el aborto no está enseñando a su pueblo a amar sino a aplicar la violencia para conseguir lo que se quiere.

Leave a Reply

 

 

 

You can use these HTML tags

<a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>